¡HOLA!

El concepto de la panadería empezó a surgir en mi cabeza como una solución a mi necesidad, pero yo dedicaba a lo que estudié, asesoría de empresas, y simplemente lo veía como una buena idea.

El empujón para empezar este proyecto me lo dio la pandemia, como a muchos, me despidieron de mi trabajo, lo que hizo replantearme mi trayectoria y decidir apostar por tener mi propio negocio, mi propia panadería.

Desconocía totalmente el mundo de la panadería, y empecé a hacer cursos donde poder familiarizarme con el oficio y saber si realmente era algo que me gustaba lo suficiente como para dedicarme a ello, me encantó y me enamoré de este oficio.

Desde entonces, después de varios cursos, tener mi primer hijo y trabajar en varias panaderías en Galicia, volví a Málaga con la intención de abrir aquí mi panadería Ana la Fantástica. Me gustaría recalcar mi agradecimiento a cada una de las personas que me han hecho llegar hasta aquí, sin vosotros esto no hubiera sido posible, siempre os estaré agradecida.